Casi siempre. Cuando empiezo a teclear las letras de la
computadora. Cuando atiendo una llamada del móvil. O cuando me he tenido que
hacer una resonancia magnética. Casi siempre me viene a la mente la
extraordinaria figura de uno de los grandes científicos del siglo XX: Alan Turing. A este británico nacido el
23 de junio de 1912 le debemos gran parte del desarrollo de la ciencia de la
computación y de la inteligencia artificial. Pero le debemos mucho más.
Alan nació en Londres
y desarrolló su extraordinaria capacidad intelectual por la recia senda de las
matemáticas. Debido a sus estudios en el ámbito de la criptografía fue
reclutado por el ejército británico para descifrar los secretos de la máquina Enigma . Con este
artefacto, que tenía el inofensivo aspecto de una de máquina de escribir, los alemanes
mandaban sus instrucciones secretas durante el desarrollo de la II Guerra Mundial.
Cerca de 30.000 máquinas "Enigma" compró el ejército germano. Se llamó a Turing para
trabajar en Bletchley Park con la
intención de hallar la clave del funcionamiento de las Enigmas. Para ello ,
Alan contribuyó decisivamente a la creación de una serie de máquinas, llamadas "bombes", que fueron
adornadas con nombres de delicadas féminas: Victory,Agnes… Cerca de
10.000 personas trabajaron con 1.200 "bombes". Sería muy curioso observar a jugadores
de bridge, de ajedrez, matemáticos y criptógrafos buscando la solución día y
noche. Y dieron con la clave. Rompieron los códigos de la Enigma. Según diversas
estimaciones, este hecho supuso una reducción de 2 o 3 años de guerra. Muchas
vidas salvadas. En concreto, si cada año de guerra arrojó cerca de 10 millones
de muertos, romper los códigos de la Enigma "ahorró" entre 20 y 30
millones de vidas. Y allí estaba Alan.
Como Alan estuvo en la creación de la primera computadora.
Sucedió en 1943 siendo bautizada con el pomposo nombre de Colossus. Se dió así forma a uno de los primeros software de
computación, como el que albergó la inmensa Manchester
Mark I: la primera computadora real. Fue en 1949. Algunos científicos
afirman que la Cibernética hubiera llegado igual sin Turing, pero siendo
cierto que la Ciencia se hace entre
todos, no es menos cierto que unos empujan más que otros. Se estima que ,sin
Turing, la Cibernética hubiera tardado casi una década en llegar al nivel que
consiguió con sus aportaciones.
Alan, consumado corredor de fondo ( estuvo a punto de representar a Inglaterra en las Olimpiadas de 1948), se preguntaba mientras hacía millas de un lugar a otro, cercano a Cambridge, si las máquinas podían pensar o hacer cualquier cálculo que podamos concebir. La primera pregunta se materializó en el afamado Test de Turing. Este fue presentado en 1950 en la revista Mind a través de un artículo denominado "Computing Machinery and Intelligence". El test consiste en que un juez comprueba si el diálogo entre la máquina y el ser humano no permite distinguir la naturaleza real de cada interlocutor. Todavía no ha sido superado pese a algunos intentos. En 1964 lo intentó Joseph Wiezenbaum con el programa "Eliza". La máquina hacía de médico psiquiatra. El resultado fue un completo desastre. Se dice que hasta 2029 los ordenadores no superaran el test de Turing. Mientras tanto nos tenemos que consolar con un test de Turing " a la inversa" que todos hemos pasado alguna vez. Es el test CAPTCHA (Completely Automated Public Turing test to tell Computers and Humans Apart). Con él se trata de conseguir que la computadora distinga entre una persona y una máquina evitando acceso de autómatas.
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Variedades de test CAPTCHA |
Y la otra pregunta- si las máquinas pueden hacer cualquier
cálculo que podamos concebir- fue respondida en sentido positivo, pero no con el uso de axiomas sino a través de la máquina de Turing. En definitiva, con este modelo, se estimaría lo que era computable. De mismo modo,Turing
admitía que hay problemas matemáticos que ninguna máquina podría resolver. Los
denominados incomputables. La distinción entre lo computable y lo incomputable
es fundamental para el avance de la cibernética. Solo así se pueden explotar
sus potencialidades. El mundo , como hoy lo concebimos, debe mucho al gran
matemático británico. Tablets, Internet , los móviles, llevan algo de Turing.
Es díficil hoy imaginarse la vida sin estos artefactos.
Sus grandes aportaciones no fueron suficientemente valoradas por una sociedad pacata e hipócrita. La sociedad británica de los años 50 y , en alguna medida , la sociedad británica de hoy no le perdonaron su orientación sexual. Fue condenado por conducta desviada y vilmente expulsado del "olimpo" científico en el que merecía estar. El 7 de junio de 1954, con sólo 41 años, Turing apareció muerto en su habitación. A su lado se halló una manzana con cianuro. Posible suicidio. Es inevitable pensar el retroceso que supuso perder a un visionario de su talla con esa edad, las ideas que hubiese aportado para el progreso de una Humanidad que le dio la espalda.
Se ha intentado reparar el daño a través de reconocimientos y premios como el "Turing Award" , auténticos "oscars " de la computación. Incluso el Primer Ministro Británico, Gordon Brown, en septiembre de 2009 pidió disculpas en nombre del Gobierno Británico por el horrible trato dispensado a Turing. Su declaración fue la siguiente:
"2009 ha
sido un año de profunda reflexión - una oportunidad para que Gran Bretaña, como nación, conmemore las
profundas deudas que tenemos con aquellos que vinieron antes. Una combinación
única de aniversarios y hechos que han renovado en nosotros ese sentimiento de
orgullo y gratitud que caracteriza la experiencia británica. Antes este año he
honrado junto con los presidentes Sarkozy y Obama el servicio y sacrificio de
los héroes que tomaron las playas de Normandía hace 65 años. Y justo la semana
pasada, conmemoramos los 70 años desde que el gobierno británico declarara su
intención de levantarse en armas contra el fascismo y se declarara el estallido
de la Segunda Guerra Mundial. Así que estoy encantado y orgulloso de que,
gracias a una coalición de informáticos, historiadores y activistas LGBT, tengamos una oportunidad
este año de celebrar otra contribución de la lucha de Gran Bretaña contra la
oscuridad de la dictadura; la del rompe códigos Alan Turing.
Turing era un matemático brillante, conocido fundamentalmente por su trabajo
para romper los códigos Enigma. No es ninguna exageración decir que, sin su
extraordinaria contribución, la historia de la Segunda Guerra Mundial podría haber
sido muy diferente. Él era ciertamente una de esas personas de las que podemos
decir que su contribución personal ayudó a cambiar el rumbo de la guerra. Por
esto la deuda de gratitud que tenemos con él hace aún más horrible que fuera
tratado de forma tan inhumana. En 1952 fue condenado por «indecencia grave» -
en efecto, fue juzgado por ser gay. Su condena -y tuvo que enfrentarse a la
infame elección entre esto o la cárcel- fue la castración química mediante una
serie de inyecciones de hormonas femeninas. Se suicidó sólo dos años después.
Miles de personas se han reunido para pedir justicia para Alan Turing y un
reconocimiento de la horrible forma en la que fue tratado. Aunque Turing fue
procesado según las leyes vigentes en la época y no podemos hacer retroceder el
tiempo, el tratamiento que recibió fue por supuesto absolutamente injusto y me
satisface tener la oportunidad de decir cuán profundamente apesadumbrado estoy y
estamos todos por lo que le ocurrió. Alan y los otros miles de hombres gay que
fueron condenados tal y como él lo fue bajo leyes homofóbicas fueron tratados
de manera terrible. A lo largo de los años millones más vivieron con el miedo
de ser condenados.
Me enorgullece que esos días se hayan acabado y que en los 12 últimos años este
gobierno haya hecho tanto para hacer la vida más justa e igual por nuestra
comunidad LGBT. Este reconocimiento de Alan como una de las más famosas
víctimas británicas de la homofobia es otro paso muy retrasado hacia la
igualdad.
Pero aún más que eso, Alan se merece el reconocimiento por sus contribuciones a
la humanidad. Para aquellos nacidos después de 1945, en una Europa unida,
democrática y en paz, es difícil imaginar que nuestro continente fue una vez el
escenario de la hora más oscura de la humanidad. Es difícil creer que aún
queden personas vivas que pueden recordar que la gente pudo ser consumida de
tal modo por el odio -por el anti-semitismo, por la homofobia, por la xenofobia
y otros muchos prejuicios- que las cámaras de gas y los crematorios se
convirtieron en parte del paisaje europeo igual que las galerías y
universidades y salas de concierto que habían marcado nuestra civilización
europea por cientos de años. Es gracias a hombres y mujeres que estaban
totalmente dedicados a luchar contra el fascismo, personas como Alan Turing,
que los horrores del holocausto y de la guerra total son parte del pasado de
Europa y no del presente de Europa.
Así que en nombre del gobierno británico y en el de todos los que vivimos en
libertad gracias al trabajo de Alan me siento orgulloso de decir: Lo sentimos,
te merecías algo mucho mejor.
Gordon Brown."
Sin embargo, resulta curioso comprobar ,una vez más, como
la estupidez sigue defendiendo con ahínco sus territorios: en 2012 el
Parlamento Británico se negó a dar el indulto al científico al considerar,
"of course", que la homosexualidad era un delito cuando
sucedieron los hechos.
El caso de Turing muestra como la sola orientación sexual
fue suficiente para ningunear a uno de los más excelsos científicos del siglo
XX sin tomar en consideración su contribución, no sólo al progreso de la
Ciencia , sino a la salvación de
millones de vidas en la II Guerra Mundial. Hoy no vivimos en la sociedad
británica de los años 50, pero existen territorios ideológicos anclados en el
pasado más rancio que siguen maltratando la diversidad y la libertad de opción.
Por eso , como dije, casi siempre que enciendo el ordenador me acuerdo de los logros y de la vida de Turing mostrándole así, a mi manera, un profundo agradecimiento.Y al mismo tiempo, mantengo siempre encendido mi compromiso con la libertad y el respeto a todas las opciones y modos de vida.
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Hidrogenesse es un grupo de electropop barcelonés fundado en 1997. En 2012, coincidiendo con el centenario del nacimiento del científico inglés, editaron su disco "Un dígito binario dudoso. Recital para Alan Turing". Sus ocho canciones tratan de la vida y obra de Turing
Más información en:
- blogs.elpais.com/turing
- afterbeatles.blogspot.com
- wikipedia.com
- www.turingarchive.org
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